AHORA, LA CONFEDERACIÓN SOCIALISTA ARGENTINA

Partidos y agrupaciones que reconocen una matriz socialista común y adhieren al proyecto nacional, popular y democrático que lidera Cristina Fernández de Kirchner presentaron en Buenos Aires un nuevo espacio político. En el acto, hablaron sus principales referentes y el vicepresidente de la Nación.

 Foto: Fernández y Fuentes

Más de un millar de militantes entusiastas colmaron el pasado 30 de junio el auditorio de Foetra para celebrar el lanzamiento de la Confederación Socialista Argentina (CSA), integrada por partidos y agrupaciones de todo el país que comparten el ideario de un socialismo popular, democrático y latinoamericano, expuesto en el documento fundacional que se reproduce en las páginas centrales de este suplemento. Durante el acto, hablaron los principales referentes de este nuevo espacio y el vicepresidente, Amado Boudou. Y dijeron presente dirigentes de fuerzas nacionales que comparten el apoyo al proceso político que conduce Cristina Fernández de Kirchner, así como delegaciones de otros países, como la encabezada por Iván Borcoski, integrante del Comité Central del Partido Socialista de Chile.

Tras la exhibición de un documental que recupera los principales hitos en la trayectoria del socialismo argentino y latinoamericano, la apertura estuvo a cargo de Oscar González, dirigente del Socialismo para la Victoria y secretario de Relaciones Parlamentarias de la Nación. “Frente a algunos que quieren malversar los ideales del socialismo, queremos dar la bienvenida a todos aquellos que vienen a confirmar que estamos dispuestos a ser coherentes con nuestra historia y sobre todo con el proyecto de crecimiento económico con inclusión social que lleva adelante el gobierno del Frente para la Victoria, el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner”, dijo González. Y saludó la presencia de Boudou, que viene siendo “víctima de una campaña de difamación dirigida por el poder económico concentrado”.

“Para nosotros, ser socialista no es una etiqueta. Se es socialista por las ideas, pero fundamentalmente desde la acción”, señaló por su parte Fernanda Gigliani, concejala rosarina por el Partido del Progreso Social (PPS). Recordó así a Manuel Ugarte, José Ingenieros y Alfredo Palacios, que “lucharon toda su vida por los derechos de los trabajadores, por la patria argentina y latinoamericana y contra el imperialismo”, y a tres de “las mujeres que han luchado y dado su vida en pos de engrandecer esta patria: Alicia Moreau de Justo, Evita y quien conduce los destinos de este país, nuestra presidenta Cristina Fernández de Kirchner”.

Reivindicó también el momento que están viviendo los jóvenes en la Argentina. “Nos toca ser protagonistas, partícipes y artífices del futuro y del presente. Y el desafío es demostrar que estamos a la altura de las circunstancias; pero también estoy convencida de que solos no vamos a ningún lado, que necesitamos sostenernos, respaldarnos y aprender con humildad de aquellos que más experiencia tienen”, sostuvo.

Fue luego el turno de Borcoski, quien aludió a las conversaciones que han venido manteniendo los socialistas chilenos con sus pares argentinos hoy reunidos en la CSA y manifestó que vienen siguiendo muy atentamente el proceso iniciado en 2003. “Oscar González nos decía‘¿Cómo vamos a estar en contra del proyecto popular y nacional?’ Y esa simple frase nos clarificó lo que estaba pasando con el socialismo argentino y su relación con los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner”, refirió. El dirigente chileno recordó la figura de Salvador Allende y dijo que la larga noche de la dictadura les había enseñado la importancia de contar con un instrumento político como la CSA. Finalmente, auguró que Michelle Bachelet volverá a ser presidenta de Chile y exclamó: “Hay que poner toda la voluntad política en lo que viene, avanzar por el proyecto nacional y popular, y seguir adelante con todas las fuerzas de la historia”.

A continuación, el intendente de Zárate, Osvaldo Cáffaro, resaltó la importancia de poner en práctica aquellos valores que algunos sólo declaman: la solidaridad, la participación, la descentralización y la justicia social. Y apuntó que en su ciudad habían apostado a integrar la gestión comunal con las políticas públicas de la provincia y las políticas progresistas del gobierno nacional. “Los socialistas tenemos que entender que no se trata sólo de la planificación hacia adelante, sino del aquí y ahora, de cómo resolvemos los problemas”, apuntó Cáffaro. Y añadió: “Cómo no vamos a acompañar un proceso que ha mejorado considerablemente la calidad de vida después de tantos años. Vivimos en otro país gracias a los gobiernos de Néstor y Cristina. No pertenecen a nuestro partido, pero no hay que llamarse socialista para hacer socialismo. Y eso es lo que ha hecho el Frente para la Victoria en la Argentina”.

Héctor Cavallero, el primer intendente socialista de Rosario y actual concejal por el PPS, rescató a su vez la vigencia de las banderas históricas del socialismo: libertad, igualdad y solidaridad; pero enfatizó que no se trata de palabras vacías de contenido. “Para acercarnos a la libertad, los socialistas tenemos que romper dependencias indignas, como el miedo, el hambre, la ignorancia, la enfermedad, la falta de vivienda. En cuanto a la igualdad, también llamada justicia social, lo que nos diferencia de otros impostores es que cuando nos toca gobernar aplicamos ese concepto. E igualar, en todos los órdenes de la vida, es darle más al que más necesita, que es el que menos tiene. Por eso, durante nuestra primera intendencia socialista, pusimos cloacas en mil 400 manzanas, miles de cuadras de pavimento, red de gas en toda la ciudad y desagües pluviales, porque la segunda ciudad de la República se inundaba”, sostuvo. Y añadió: “El Estado, que es la organización del pueblo en la democracia, tiene que proteger a las personas y a los grupos de personas que quedan en inferioridad de condiciones. Por eso, estas tres banderas del socialismo son las que levantará la CSA, porque nos van a permitir construir una sociedad donde haya convivencia humana y con la naturaleza”.

Destacó luego que la contradicción principal sigue siendo liberación o dependencia. “Mientras no podamos romper la dependencia del capital económico concentrado de las transnacionales y de su gobierno mundial, que son el FMI, el Banco Mundial y la Organización Mundial del Comercio, no vamos a poder construir nunca el socialismo”, aseguró.

Después de reseñar las luchas contra el imperialismo protagonizadas por los pueblos latinoamericanos y errores cometidos por la izquierda, Cavallero instó a militar y a participar en todos los espacios posibles para defender las posiciones alcanzadas porque, “a este gobierno lo atacan porque quieren eliminar los éxitos obtenidos en la defensa de los trabajadores, de la Nación y de Latinoamérica”.

El diputado Jorge Rivas, al que se habían referido con afecto y reconocimiento todos los oradores, comenzó su discurso con un agradecimiento a la Federación de Obreros y Empleados Telefónicos de la República Argentina (Foetra), que facilitó el uso de su local de Balvanera. Sintetizó después el significado que el lanzamiento tenía para los socialistas. “Estamos dándonos una organización democrática, en la que las ideas van a circular libremente. Una organización de izquierda, con un fuerte compromiso con el pueblo trabajador. Una organización popular, en defensa siempre de los sectores sociales más vulnerables. Una organización, por fin, latinoamericanista, ya que si bien no renunciamos a la realización de una humanidad socialista, somos conscientes de que nuestro mejor aporte a esa causa es contribuir a la transformación de nuestro país y de nuestra región”.

En el mismo sentido, precisó que la CSA “debe ser lo suficientemente amplia y tolerante como para que en ella podamos convivir y militar la enorme mayoría de los socialistas dispersos a lo largo y a lo ancho de nuestra nación”, como contracara y alternativa a “esa organización burocratizada, sectaria, oligarquizada y vertical, que es en lo que se ha convertido el llamado partido Socialista en la Argentina”.

Se refirió después al presente y el futuro del proyecto liderado por la Presidenta: “No tengo dudas de que nuestra unidad hará que seamos más contundentes y gravitantes a la hora de defender y profundizar ese proyecto”, dijo Rivas. Ambos planos, explicó, no se superponen, sino que se complementan. “No concebimos el tiempo de la construcción de nuestra propia organización socialista desentendidos del proyecto nacional y popular. Por el contrario, estamos convencidos de que cuanto más se profundice el actual proyecto, más nos iremos acercando a nuestro ideario socialista”, enfatizó.

Rivas reafirmó que la conformación de la CSA se inscribe dentro del marco del Frente para la Victoria. Y destacó: “Ello debe leerse con toda claridad: no somos ni seremos neutrales o indiferentes, ante las disputas y tensiones que se dan y se seguirán dando dentro del frente. Tenemos claro que el bloque de derecha es el principal enemigo del progreso social. Pero también sabemos, porque ha sucedido con frecuencia a lo largo de nuestra historia, que suele usarse a ciertos actores del campo popular como arietes o mascarones de proa, para penetrar en el tejido social”.

Su discurso concluyó con una cita del peruano José Carlos Mariátegui: “No queremos, ciertamente, que el socialismo sea en América calco y copia. Debe ser creación heroica. Tenemos que dar vida, con nuestra propia realidad, en nuestro propio lenguaje, al socialismo indoamericano”.

En el cierre del acto, el vicepresidente de la Nación se refirió a la cumbre del Mercosur y la Unasur, que tenía lugar por esos días en Mendoza, y resaltó que “por primera vez hay conciencia de una Patria Grande” en la región. Boudou celebró también el lanzamiento y aseguró que “el socialismo ocupa un lugar fundamental en el proyecto en el que estamos unidos y organizados bajo el liderazgo de Cristina, llevando adelante una transformación que alcance a la mayor cantidad de argentinos posible”.

“Tenemos que construir un país para 40 millones de argentinos”, dijo Boudou, quien advirtió que desde diversos sectores se está intentando frenar este proceso, incluso mediante “nuevos formatos de golpes contra la voluntad popular”, en referencia a la destitución del presidente paraguayo. “Las corporaciones pretenden volver a imponer procesos que le den la espalda al mandato de los pueblos y quieren conservar democracias tuteladas en lugar de democracias transformadoras como la que estamos impulsando desde 2003”, concluyó.

Además de los oradores, integraron la mesa del acto el diputado provincial santafesino Oscar Urruty; el senador nacional por Tierra del Fuego Osvaldo López y los dirigentes de los partidos y agrupaciones que suscribieron el acta fundacional de la CSA, entre otros, los concejales Juan Manuel Sequeira, de Junín, y Mariano Stinga, de Merlo, San Luis; los funcionarios zarateños Aldo Morino, Pablo Giménez, Rodrigo García Otero y Ariel Ríos; el director de La Vanguardia, Guillermo F. Torremare; el economista Alejandro Rofman; la ex diputada nacional Paulina Fiol; el ex edil marplatense Juan Carlos Cordeu; Nora Díaz, de Neuquén; Fernando Romero, de La Rioja; Pedro Katz, de Tucumán; Daniel Arias, de Entre Ríos; Pierina Vallejos y Margarita Enríquez, de Corrientes; Claudio Simone y representantes de los jóvenes y mujeres socialistas. Acompañaron también el acto el subsecretario general de la Presidencia y titular de Forja, Gustavo López; el diputado chubutense Anselmo Montes; Juan Zabaleta, secretario administrativo del Senado; Lía Méndez, del Partido Humanista; Jorge Pereyra, del Partido Comunista Congreso Extraordinario; el ex diputado nacional Leonardo Gorbacz; Gustavo Cardesa, presidente del Partido Intransigente; Eduardo Sigal; Osvaldo Iadarola y Claudio Marín, secretario general y adjunto de Foetra, respectivamente; Eduardo Binstock, del Movimiento Evita; Susana Delbo, de la Fundación Jean Jaurès; Gustavo López y Gustavo Acosta, del PSOE en Argentina; Desiré Rodríguez, del Partido Socialista Unificado de Venezuela; Alejandro Van de Casteele, de Fuerza Militante; el ex legislador porteño Gonzalo Ruanova; el cineasta David Blaustein; y Marcelo Yaquet, de la Corriente 17 de agosto.

Hicieron llegar su adhesión la legisladora porteña Susana Rinaldi, de viaje en China; el diputado nacional Andrés Larroque, secretario general de La Cámpora; el presidente del bloque de diputados nacionales del Frente para la Victoria, Agustín Rossi; la diputada provincial bonaerense Rocío Giacone; Andrés Lablunda, de Kolina; el filósofo Ernesto Laclau; la legisladora porteña Virginia González Gass; el Partido Socialista de Uruguay en la Argentina; el PS de Ecuador; el PT de Brasil; la Juventud Kirchnerista de Izquierda; y las agrupaciones Putos Peronistas, García Lorca, Jóvenes en Construcción y Patria y Pueblo.

Asimismo, entre otros destacados referentes socialistas, estuvieron el ex secretario general del PSD, Héctor Bravo, el ex diputado Juan Carlos Coral; los ex legisladores Fernando Finvarb y Mirta Addobati; Alberto Berretta, Lino Di Giorgio, Juan Carlos Fernández Alonso, Lelia Reta y el legendario dirigente Rubén Visconti (ver recuadro en página 5).