"Ya no soy pecadora"

Con un espectáculo intimista y rico en recursos sonoros, Ana Prada lanzó el sábado 24 de agosto su último trabajo e hizo un repaso por su repertorio. En el marco del ciclo “Autores del Uruguay”, que organiza la Asociación General de Autores de ese país, el lugar elegido para la presentación de Soy Otra en Buenos Aires fue Niceto Club, en el barrio de Palermo. Una buena conjugación de luces y ambientación, y un paso casi obligado por las barras enmarcaron la previa. De veinteañeros para arriba, colmaron el lugar y ajustados, pero no apretados, se fueron sumergiendo en la atmósfera Prada. El público le dio un acalorado recibimiento a la uruguaya, que irrumpió en el escenario secundada por su banda.

Abrió con un tema de su último disco, “Donde vas a ir que más valgas”, y a este le siguió “Sólo un rumor”. Fiel a su estilo y guitarra en mano, Prada improvisó un nuevo estribillo y al verso original, de marcada tristeza, le imprimió un manto de esperanza: “Quien te ha dicho a ti que no te quiero, quien te ha dicho a ti que yo de amor no muero, quien te ha dicho a ti que no te espero…” Final feliz, aunque fugaz. El público celebró. El espectáculo tuvo invitadas especiales: la cantante uruguaya María Rosa interpretó “Adiós”, del segundo disco Soy Pecadora; la cantautora española Queyi cantó con Prada “Hilo y dedal”, tema de su autoría incluido en Soy Otra. A este dúo se sumó después la cubana Yusa que irrumpió con su energía caribeña y su guitarra en “Para decirte que te quiero”, también del último disco. En canciones como “Tentempié”, “Tierra adentro” o “Soy Sola”, de su primer álbum, la voz del público se amalgamaba con la suya de principio a fin. Y en otros pasajes, cercanos al final del espectáculo, estallaron sus fanáticas con dos de sus clásicos, hitos del sello Prada: “Tu Vestido” y “Soy Pecadora”. En este último, Ana remató: “Yo dejé de ser pecadora; desde que se aprobó la ley, no tiene gracia”.

Prada tiene un doble encanto para sus seguidores. Uno de ellos se genera con el estilo de su música, la calidez de su voz, al desmenuzar sus letras. El otro se descubre en sus conciertos, y tiene que ver con el intercambio que establece con el público. Interactúa y dialoga con sus seguidores, saluda a sus amigos, bromea, comenta y le comentan, se conecta con sus fans. Es carismática, relajada, ocurrente, se ríe de sí misma y esa frescura que despliega naturalmente es a esta altura su marca registrada.

Solana Trucco